miércoles, 22 de abril de 2009

Con el cuello abierto en el terrible tajo por la mano brígida del fantasma que pasa en volá de estrella fugaz arrancando de la fatalidad seguido por millones de moléculas de nieve; cuello-abierto como las piernas de la más sifiliana puta con la cara pintarrajeada, como el vil pollo de campo, colgado de cabeza, mirando todo invertido, viviendo al revés, que es lo mismo que morir; cuello-abierto-colgado como corazón valiente que grita por la mina que le mataron y suelta el trapo entero sucio por la sangre menstrual de los maricas ingleses que lloraban cuando los asesinaba con maestriales movimientos; cuello-abierto-colgado-llanto como el paradigma del fracaso que agoniza en el callejón oscuro olvidado que ni superman puede encontrar si lo buscara; cuello-abierto-colgado-llanto-olvidado como la cabeza sangrante de Jesucristo cuyo cuerpo entero llora; cuello/corazón/cabeza/cuerpo-abierto-colgado-llanto-olvidado-mutilado te muestro: no es nada bonito, nada sentimientos bellos ni estilizaciones intelectuales ni imágenes sagradas; solo es una masa sangrante irreconocible de carne y huesos de manera homogénea que se mezclan con los fierros y las maquinarias y las ideas que deambulan: carne con sangre con fierros con óxido con enfermedades con asfalto con odio: devenir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario